Page 39 - Revol122
P. 39
López-Méndez y Costa-Cabanillas El capítulo que cierra el libro está dedicado al mundo
interior, a los llamados eventos privados a los que
La radical capacidad de obrar, como quehacer que resulta muy difícil acceder. La mente y la conciencia,
cumple una función adaptativa y tiene un significado los pensamientos y los sentimientos, las fantasías y los
intencional, es la más medular y cardinal de todas las recuerdos, son ventajas evolutivas que a veces nos
dimensiones de la biografía personal, la más juegan malas pasadas. Esto ocurre cuando los
trascendental. Quizá así se pudiese resumir el mensaje pensamientos, los sentimientos, los recuerdos, etc.
en torno al cual se construyen los contenidos que van a llevan al ensimismamiento y “problematizan” la vida de
estructurar el capítulo sexto. En sintonía con esta las personas. Esa problemática, explican los autores,
lógica, está la perspectiva evolucionista de Darwin, y puede suponer un conflicto psicológico pero no una
cómo no, el condicionamiento operante al que influye enfermedad como postula el modelo psicopatológico
poderosamente. No hay experiencia vital, problema desde su parodia científica.
psicológico alguno, que pueda substraerse a ese obrar
como praxis contextualizada e intencional. No sólo Al ser este modelo tributario del dualismo cartesiano,
hacer es obrar, también lo es pensar, decir o sentir. “sustantiviza” la mente alojando en ella todo evento
Cualquier forma de obrar es entonces una operante privado y desnaturalizando su sentido radicalmente
como raíz existencial y, por tanto, biográfica. conductual. Los pensamientos, los sentimientos, las
fantasías, los recuerdos no ocurren “dentro” (en la
En el capítulo séptimo se explica cómo los cambios mente, en la intra-psique) sino, como cualquier otra
que vamos haciendo en el mundo, con nuestras obras, conducta, en la relación (en las transacciones dirían
producen también cambios en nosotros en función de López y Costa) del yo con el mundo.
las consecuencias que obtengamos. Si las
consecuencias de lo que hacemos son valiosas El capítulo se cierra con una severa crítica al
(obtener un beneficio o evitar un perjuicio) volvemos a “cerebrocentrismo”. Los problemas psicológicos no son
repetirlo. Si, por el contrario, son punitivas (obtener un emanaciones de patologías mentales alojadas en el
perjuicio o perder un beneficio) no perseveramos en lo cerebro. Tan falaz es decir que los problemas
que hemos hecho. Es el análisis de este flujo el psicológicos y el comportamiento humano residen en el
elemento cardinal de la revolución del paradigma cerebro, como decir que el amor reside en el corazón.
operante en psicología. López y Costa aportan
ejemplos para de-mostrar que por esta lógica se rige Merece la pena que te sientes unas cuantas horas
todo comportamiento, sea éste problemático ante las páginas de este libro, no te dejaran indiferente.
(problemas psicológicos) o no. El texto se lee bien y para hacer su lectura placentera,
los autores no han tenido que recurrir ni a fruslerías ni a
Al lenguaje dedican el capítulo ocho. Presentan el simplezas. A pesar de que reiteran, tal vez en exceso,
hablar como una forma de comportarse regida por las argumentos y tesis, no dejan de presentarse con
mismas leyes que gobiernan cualquier conducta. La sobrada coherencia y solvencia discursiva.
conducta verbal, en la que sitúan al delirio, gobernada
por reglas, explican, cumple una función sustitutiva y
mediadora de toda circunstancia que en cualquier
contexto pueda acontecer. Pero, a veces, las palabras,
cuando se desligan de las transacciones de la persona
con su entorno, enmascaran la realidad mixtificándola.
Acaece entonces el fenómeno de la logomaquia en el
que la literalidad de las palabras domina a su
significado escindiéndose de él. La persona queda
atrapada en la literalidad de su discurso entrando en
una suerte de cavilación continua, rumia, que la distrae
de lo que para ella es valioso. Tal dinámica está
presente en la mayoría de los problemas psicológicos
(ansiedades, delirios, depresiones, “bipolaridad”, etc.).
Juan Fernández Blanco
Paloma Martínez Heras
María Salazar Garcia
37 Rehabilitación Psicosocial 2015; 12(2): 36-37