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Club Social para personas con discapacidad relativa a salud mental, espacio para el ocio que posibilita su participación

Anexo 5. Características del Club Social que interesan a los profesionales

• Yo creo que una de las cosas más importantes es la no obligatoriedad, que la gente venga porque se sienta a
gusto con nosotros, ¿eso qué implica? Pues, que se crea mejor ambiente. El hecho de no verte forzado a
participar, sino que cada uno vaya viendo donde quiere meterse o en qué conversación quiere participar, ayuda a
que la persona se sienta más a gusto, más libre y que también nos contagiamos. Alguien, en una asamblea
propone unas ideas o quiere llevar a cabo, y de ahí sale a veces que otra diga, “¡oye, yo también tengo cosas
para aportar! (Zuria)

• Más que lo que hacemos, que hacemos muchas cosas; a mí lo que me gusta es que es un sitio donde miras a las
personas. Y lo digo por la experiencia y por la forma de trabajar que tenemos. No preguntamos ni qué diagnóstico
tiene, ni qué tal esta, ni cuánto de mal o bien lo tiene. (Javi)

• Y te fijas en las cosas que puede hacer y lo que puede aportar, lo que puede dar de sí. Yo creo que lo diferente y
por ello bueno, es eso: el fijarte en las cosas que puede aportar cada uno. Es lo más novedoso y lo que más me
gusta. Creo que funciona, ¡el día a día es la muestra de que esto funciona! Lo que la gente dice, cómo se va
sintiendo cuando logra algo, cuando ve que va creciendo de alguna forma. Crecer no significa un cambio drástico,
igual son pequeñitas cosas ¡vale! Pero, ¡pequeñitas cosas hechas por uno!, ¡es algo muy grande! No sé, yo me
quedaría con eso. (Javi)

• Vamos a facilitar cosas como que: si ella tiene la ilusión de escribir un libro, le apoyamos. El hacerle preguntas,
para que ella misma vaya llegando a esa repuesta y podamos hacer algo. Lo que intentamos es propiciar
espacios, dar oportunidades, acompañaros a hacer lo que os haga sentir bien (Zuria)

• El estar todos iguales, ¡a la misma altura, que decimos a veces! Al final: si todo depende de uno, o ese uno es el
copón, o si dependen de 50 personas, que: ¡todas pueden aportar algo! Creo que es una forma más fácil de
crecer, que te iguala. Eso normaliza. Porque a mí, si toda la vida me han tratado de incapaz y luego veo: “¡si mi
opinión es igual que el que tengo al lado! Entonces, eso, ¡ya! te hace creértelo. En las asambleas, en la vida del
club en general. Es una tontería ¡que no es tontería! En cualquier cosa que hagamos, el que funcione así, creo
que es lo que lo hace bueno (Javi)

• Lo que aportamos, al final lo que aportamos cada uno es: que funcione el club. Yo aportaré varias cosas, otros
otras cosas. Lo que cada uno sepa y le apetezca, el poder darlo a todos. Sí, ¡no estancarnos también! (Javi)

• Yo me voy con un puñado de cariño a mi casa todos los días, y que: ¡también se agradece! También tengo mis
problemas, y que: ¡también siento que vosotros os preocupáis por mí! (Zuria). Te lo cuento porque eres mi amigo
(Javi)

Rehabilitación Psicosocial 2015; 1212): 25-33 33