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La atención a personas inmigrantes con trastorno mental sin hogar desde una perspectiva cultural
1. INTRODUCCIÓN tural” que, en función de las características personales de
ambas, de las estrategias empleadas por cada una de ellas
El sinhogarismo es, probablemente, el ejemplo más trágico y del contexto social y normativo donde se establezca la
de exclusión a todos los niveles. Por otro lado una casa no relación, pueden tener efectos muy dispares. Pueden con-
es sólo un lugar para guarecerse, es así mismo un espacio ducir a un entendimiento e incluso un enriquecimiento de
vital donde establecemos nuestras relaciones sociales ínti- ambas pero también pueden generarse conflictos debido
mas, donde descansamos, donde realizamos actividades a dificultades de comunicación y entendimiento, a prejui-
de ocio, nuestros hábitos de higiene, guardamos nuestras cios, etc. que provocan un aumento de la desconfianza y el
pertenencias… en definitiva, un lugar “nuestro”, donde nos miedo al otro/a. Así mismo hay que tener en consideración
sentimos protegidos. el hecho de que esta interacción no se produce entre dos
partes igualitarias, sino entre la persona inmigrante, caren-
En los últimos años el perfil de las persona sin hogar ha ido te en muchos casos de derechos y, la persona autóctona
cambiando, siendo en la actualidad en su mayoría inmi- que tiene todos los recursos de poder. Esta interacción cul-
grantes tal y como indican las memorias de los diferentes tural puede desarrollarse en un ámbito privado; un bar, un
centros que atienden a personas sin hogar, o los recuentos comercio, el metro, etc. o bien en un servicio público; edu-
nocturnos. El último recuento realizado en Madrid en el cativo, social, sanitario etc. Los servicios públicos deberían
2018 señala que el 61% de las personas que pernoctaban garantizar el mejor servicio posible a todos los ciudadanos
en la calle eran extranjeros. Cierto es que ha habido un gran y estas garantían incluyen igualmente a las personas inmi-
aumento de la inmigración en España, según los datos del grantes. Es un hecho la existencia de barreras y dificultades
INI de julio del 2022 en España había un 11,7% de perso- de acceso de la persona inmigrante a diferentes servicios,
nas extranjeras pero este porcentaje no puede explicar que prestaciones etc. a las que la persona española puede ac-
más del 50% de las personas sin hogar sean inmigrantes. Si ceder sin problemas. Por tanto, consideramos que la aten-
los factores estadísticos no explican este porcentaje tienen ción a las personas inmigrantes desde una la perspectiva
que darse otro tipo de variables concretas que expliquen cultural no es una opción sino una obligación de cualquier
que se multiplique por 10 la probabilidad de estar en la servicio sociosanitario.
calle de un inmigrante comparado con un español. Final-
mente, habría que contemplar el hecho de que existen per- Una adecuada intervención con estas personas depende-
sonas inmigrantes que tienen problemas de salud mental. rá de múltiples factores. Primeramente, se deberá atender
De los atendidos en los recursos para personas con tras- a la normativa legal ya que condiciona absolutamente los
torno mental de la Red de Atención Social de la Consejería derechos de estas personas para el acceso a múltiples re-
de Asuntos Sociales y Familia de la Comunidad de Madrid cursos sociosanitarios. Por ejemplo, en muchos casos las
en 2020, un 10 % eran inmigrantes, y en uno de los centros personas inmigrantes no tienen derecho a un tratamiento
que atiende específicamente a las personas sin hogar con médico o psiquiátrico ni acceso a la medicación que nece-
trastornos mentales (servicio PRISEMI) los datos se la me- sitan, no tienen permiso de trabajo o no tienen acceso a
moria del 2021 indican que un 53,19 % de las personas prestaciones económicas necesarias. Resulta muy inte-
atendidas fueron inmigrantes. resante la exposición de Kimlika W. (1) sobre los “ajustes
razonables” que pueden hacerse a nivel normativo y legal
COMPETENCIA CULTURAL para facilitar la integración de las minorías y el desarrollo
de sus derechos. Un segundo factor a tener en cuenta es
La primera premisa de la que partimos es que cada inmi- el rechazo social por ignorancia, prejuicios o racismo hacia
grante es primero y, por encima de todo, un individuo. Ser este colectivo, pudiendo estar motivado en estos tiempos
miembro de otra cultura no le hace automáticamente dife- por una vuelta a un nacionalismo excluyente y por un po-
rente ni los aspectos culturales han de ser siempre deter- pulismo que busca chivos expiatorios para los problemas
minantes en su comportamiento. De hecho, en ocasiones, actuales; paro, violencia o falta de coberturas del estado de
las diferencias entre dos personas de la misma cultura pue- bienestar, y que parece no ser algo espontaneo sino dirigi-
den ser mayores que las diferencias entre dos personas de do y fomentado por unos sectores del poder y la política
distintas culturas. Sin embargo, ante la evidencia estadística y de algunos medios de comunicación. Estas actitudes de
de la sobrerrepresentación de inmigrantes en situación de racismo y exclusión además de edificar barreras e impedir
calle antes referida, tendremos que buscar alguna variable el ejercicio de derechos de las personas inmigrantes, puede
o factor que lo explique. Si descartamos que sea la raza o aumentar el conflicto social y dificultar la integración y la
cualquier factor “biológico” lo que determina estas diferen- convivencia intercultural. Finalmente, otro factor a consi-
cias tendremos que considerar que son las diferencias no derar es el desconocimiento de dicha población por parte
biológicas: factores sociales, económicos, estructurales y de los/as profesionales de los recursos sociales y sanita-
culturales. Cualquier persona que nace en cualquier lugar rios donde son atendidas las personas inmigrantes y de
del mundo, desde el primero momento de su vida apren- las pautas de atención e intervención que puedan ser más
de cuándo ha de reírse o llorar, cómo alimentarse, a qué y adecuadas y efectivas. Desde nuestra perspectiva, plan-
cómo jugar, a bailar con un determinado ritmo, a asumir teamos que para realizar una adecuada atención a per-
una serie de roles según su género, edad o clase social. sonas de otras culturas, no siempre sirve hacer lo mismo
Aprende a cómo comunicarse verbal y no verbalmente que se hace con personas de nuestra cultura. Es necesario
con los demás, a cómo establecer relaciones de pareja, a un “ajuste cultural” de nuestras intervenciones habituales
qué dioses adorar y a qué demonios temer, a cómo vivir para que sean más útiles y eficaces para poder atender a la
su salud y su enfermedad y a cómo buscar su curación y, población inmigrante con la misma calidad que a la autóc-
en definitiva, a mantener los valores acordes a su entorno tona para ello proponemos como modelo de atención el
social y cultural. Todos estos elementos son lo que com- modelo de competencia cultural.
ponen lo que llamamos cultura, no son universales y de-
terminan, en última instancia, nuestra identidad: lo que so- El origen del modelo de competencia cultural lo encon-
mos lo que pensamos, sentimos y hacemos. Cuando dos tramos en la necesidad de cuidados en salud a personas
personas que han construido sus identidades en culturas inmigrantes (Purnell 1995), en la enfermería transcultural
distintas se encuentran, se produce una “interacción cul- (Leininger, Campinha-Bacote 1999) y la psicología social
10 Rehabilitación Psicosocial - Volumen 18 nº 2 - Julio-Diciembre 2022