Page 35 - Revol32
P. 35
Jimeno Valdés A. Psicorrehabilitación en el siglo XXI: desde 50 años de experiencia
co especialista individualmente es completamente imposi- de los mecanismos tradicionales, seguirá aumentando sin
ble que alcance un juicio objetivo sobre la eficacia de un fár- cesar las necesidades de consejo y ayuda a personas simple-
maco por lo que suele decidir por su costumbre o por “lo mente desgraciadas y/o enfermos que exigen también ser fe-
que le dicen”. También sabemos que los trabajos “locales” lices en la sociedad de bienestar.
sobe el tema están más bien sesgados.
— Los mismos factores anteriores propician un aumen-
Psicoterapias. Afortunadamente en los últimos años se ha to de la delincuencia organizada, que ya padecemos en el
dado un paso de gigante. El bla, bla bla o el mero escuchar mundo global, que a la vez exigirá un control de la misma
y echar a otro la culpa; es decir, evitar al paciente toda la res- por medios eficaces; por ejemplo con la implantación de lo-
ponsabilidad de lo que le pasa, ha sido sustituido por las téc- calizadores electrónicos. Es de esperar que no sea preciso in-
nicas cognitivo conductales que pueden ser bien llevadas corporarlos al documento de identidad de todos los
bajo rígidos patrones de aplicación y evaluación. En el cam- ciudadanos.
po de las psicosis son bien conocidos, por ejemplo, los pro-
gramas I.P.T. de Brenner y Roder 5 y el de K. Andres y — El aumento general del consumo centrándose cada vez
cols. 6 (Ambos de la Universidad de Berna) y a cuya difu- más en aspectos cada vez más nimios o de detalle, como ob-
sión y aplicación en España hemos contribuido desde el gru- servamos hoy entre nosotros respecto la nutrición o la es-
po de trabajo de Valladolid (A. Jimeno; N. Jimeno; M. tética corporal, contribuirá también al aumento de
Vargas.). En mi opinión estos programas tienen todavía exigencias de intervenciones de la psiquiatría y ciencias afi-
un cierto exceso de contenidos y medios verbales e insufi- nes.
ciencia de contenidos conductales. Por otra parte las técni-
cas meramente conductales como las llamadas de — La progresiva eficacia de los tratamientos e interven-
modificación de conducta o las de ensayo o juego de roles ciones psicológico psiquiátricas producirá la petición de
no han tenido un desarrollo suficiente para el tratamiento “mente a la carta”; es decir de parecida manera “quirúrgi-
de las psicosis previendo un mayor desarrollo de las mismas ca”; es decir, brutal, con la que hoy se opera y cambia la for-
en el futuro. En todo caso parece que el desarrollo y aplica- ma del cuerpo, se solicitará y conseguirán los cambios de
ción de estas técnicas se produce en una nueva armonía y carácter o personalidad lejos de los lentos e inseguros pro-
colaboración entre psicólogos y psiquiatras. La sabia utili- cedimientos psicoterapeúticos que hoy conocemos.
zación de la ley básica de la psicología del aprendizaje que
es la ley del refuerzo, espera todavía innovaciones y aplica- Intervenciones psicológicas
ciones masivas para el próximo futuro.
La aplicación rigurosa y conductista de las leyes del refuer-
Creo firmemente que este siglo recién inaugurado será el zo se aplicarán en ambientes totalmente controlados, vigi-
siglo de la mente y por ello de la psiquiatría que ha de irrum- lados por cámaras de registro continuo (no alarmarse; ya
pir con conocimientos y técnicas poderosas y sorprendentes tenemos antecedentes en esos estúpidos programas como
que hoy quizás rechazaríamos por antiéticas o anticonstitu- El Gran Hermano) que conformarán continuamente el en-
cionales… Mas la experiencia histórica muestra que nor- torno físico y psicológico durante las sesiones de trata-
mas y moralidades han de irse modificando al compás de los miento, según programas informáticos aplicados por
nuevos descubrimientos y hoy por ejemplo, aunque susciten mecanismos robóticos. No será difícil estimular directa-
enormes suspicacias temores y oponentes, hemos ido acep- mente los centros cerebrales de la recompensa y castigo
tando la utilización de la reproducción asistida; de la selec- cuando lo demande el programa. Estas estimulaciones po-
ción genética, de la experimentación con células madre (cuyo drán realizarse transcranealmente.
verdadero nombre es de células troncales), etc.
Es muy posible que los compañeros e interactores en es-
A continuación me permito hacer te entorno y que serán los reeducadores del paciente, sean
algunas sugerencias que seguramente personajes virtuales de gran perfección capaces de satisfa-
serán superadas no dentro de mucho por cer, (es decir reforzar) con los ritmos y formas exactamen-
la realidad te determinadas las necesidades del caso para la consecución
de los fines programados. Como en la educación no auto-
El avance decisivo en el conocimiento y manejo (me absten- ritaria, o en la enseñanza a las palomas a dirigir cohetes
go de escribir manipulación) de la mente depende de los si- balísticos, como consiguió Skinner, solo se aplicarán re-
guientes factores: fuerzos positivos consistiendo los negativos meramente en
la ausencia de los primeros.
- La progresiva complejidad e inestabilidad de la sociedad
técnica y globalizada que al eliminar la eficacia normativa Muy probablemente dentro de poco los pacientes o per-
sonas sometidas a estos tratamientos llevarán continuamen-
te y en su vida cotidiana monitores de tipo electrónico
que transcranealmente registrarán, avisarán o “reforza-
rán” conductas, expresiones y aun emociones de acuerdo
Rehabilitación psicosocial. 2006; 3(2):29-36 33