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Juan Carlos Rodríguez-Miguel

to, sentimientos de «ira, depresión, miedo, ansiedad,     reduccionista, de cara a la gestión de normas, acuerdos,
aislamiento, culpa, vergüenza, y la prevención de la      PIAR y otros documentos de similar tipología. «El
recuperación o la evitación de la búsqueda de ayuda»16.   proceso de rehabilitación es un proceso dinámico que
                                                          hay que ir acomodando y adaptando a las circunstan-
   Evitar el comportamiento de superioridad de-           cias y a los cambios que se vayan produciendo a los
pende, como se decía, de no perder la visión de la        largo del proceso»20.
persona, no ver sólo la enfermedad, no convertir a
la persona en enfermo. Con este fin sería bueno que           En el lado contrario, la inflexibilidad sólo lleva,
el profesional se planteara algunas preguntas: ¿Qué       salvo excepciones, al error. Además, también es clave
derecho tengo yo a actuar de este modo? ¿Estoy ayu-       distanciar la falta de flexibilidad con la que el profesio-
dando a la persona? ¿Veo la enfermedad o a la perso-      nal actúa en ciertos aspectos de su vida; transmitir la
na cuando actúo? ¿Consigo una mayor recuperación          misma a nivel laboral-relacional lleva a la prepotencia
actuando por encima de la persona o a lado de la          y, de nuevo, a la equivocación. Parece vital, pues,
misma? ¿Qué quiero conseguir exactamente con esta         observar globalmente todas las situaciones y circuns-
conducta? ¿Necesito esa superioridad para llenar mi       tancias que surgen en el proceso para ofrecer una res-
ego o reforzar mi autoestima?                             puesta adecuada y personalizada al usuario. No todas
                                                          las respuestas sirven para todas las personas.
Ayudar a recuperar el control
                                                          Comprensión
   Desde el modelo de recuperación, tomando como
referencia uno de sus principios más básicos, «se esti-      En ocasiones resulta muy difícil decodificar las
mula y facilita el autocontrol (manejo de uno mismo)»17.  situaciones que rodean a la persona con enfermedad
Por tanto, es fundamental contribuir a que el control de  mental debido a la imperante visión reduccionista de
los usuarios, el empoderamiento, recaiga cada vez más en  «normalidad» social y a la propia argamasa que cons-
sus manos y menos en las de los profesionales.            truye y configura las enfermedades mentales. Vencer
                                                          estos límites es un requisito imprescindible para el
   Hay que apoyarlos al máximo para que la toma de        profesional que tiene que «ser capaz de estar siempre
decisiones sobre su propia vida sea cada vez más autó-    abierto a nuevas comprensiones y no dar nunca la com-
noma. Es necesario, además, perder el miedo a que los     prensión por terminada o cerrada; estar abierto a la
usuarios decidan, evitar los paternalismos contraprodu-   comprensión ayuda a tener una actitud presidida por el
centes y ayudarles a recuperar el control de sus vidas,   diálogo y la tolerancia»21. Para ello el profesional debe
pero sin controlar las mismas. Algo en principio tan      aprender a ver con nuevos ojos desde una mirada empá-
difícil puede volverse tarea sencilla cuando se com-      tica.
prende que la persona sobre la que desarrollo mi labor
tiene derecho a tener una vida propia y a conducirla      Ser profesionales completos
bajo su criterio. El problema es dilucidar desde qué
momento de su recuperación comienza a tener tal dere-        «El personal, con independencia del nivel de la
cho, pero la respuesta de nuevo es sencilla, desde el     organización en que se encuentre, es la esencia de una
principio. Por lo tanto, «la importancia del profesional  organización, y su total implicación posibilita que sus
reside en su capacidad y destreza para actuar como guía   capacidades sean usadas para el beneficio de la organi-
en el camino de recuperación»18 y su labor debe tener     zación»22. Pero, ¿qué capacidades, o más bien, qué
en cuenta el respectar al máximo este derecho de auto-    características debe poseer el profesional? Existe un tri-
determinación no imponiendo criterios, sino sugirien-     monio perfecto que define a un verdadero profesional
do alternativas de forma argumentada, que orienten la     de lo social, estaría el mismo compuesto una buena for-
consecución positiva del proceso.                         mación académica, cierta experiencia en el sector, y un
                                                          conjunto de valores, actitudes y habilidades personales.
   Recordar finalmente, que el desempoderamiento          Todos estos monomios por sí solos no pueden formar al
no puede tener cabida en el proyecto recuperador ni       profesional. Es la conjunción de los tres los que nos lo
en la función profesional. Su materialización, a través   van a dar. Por tanto, cada profesional deberá evaluarse
de la vivencia experiencial del sujeto, puede contri-     así mismo para ver si su labor se apoya en este trimo-
buir a la aparición de sentimientos de «coerción e        nio o si por el contrario está descompensada. También
indefensión aprendida»19.                                 será necesario estar atento a todas las evaluaciones
                                                          externas que surgen en el medio de trabajo y, princi-
Flexibilidad                                              palmente, a las que parten de los usuarios. Aunque
                                                          antes de todo eso será imprescindible adquirir la idea
   La flexibilidad a la hora de actuar laboralmente le
dará al profesional una visión más amplia, menos

50 Rehabilitación Psicosocial 2010; 7 (1 y 2): 45-52
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