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EXPERIENCIAS ASITENCIALES
La rehabilitación psicosocial como principio ético
A. García Nieto
Centro Residencial de Rehabilitación. FEAFES-CÁCERES. Servicio Extremeño de Salud. Cáceres.
Se revisan algunos aspectos importantes de la relación era psiquiátrico, pues le hacía ser aún más paciente al estar
terapeuta-enfermo en rehabilitación psicosocial, incidiendo mermadas sus capacidades mentales. La actitud del médi-
en los principios éticos de la misma. Se aportan también co-psiquiatra se situaba en una postura todavía más pa-
algunas reflexiones surgidas de la práctica clínica de la ternalista.
autora, que apuntan a la conveniencia de mantener siempre
presente una visión ética en la práctica en rehabilitación Después de la Segunda Guerra Mundial y tras la vulne-
psicosocial. ración de los derechos humanos que supuso, apareció la
Declaración de los Derechos Humanos de las Naciones
Palabras clave: Unidas en 1948. Se empieza a considerar la autonomía del
individuo como tal, y con ello también empieza a trans-
rehabilitación psicosocial, ética. formarse la relación médico-paciente al tenerse en cuen-
ta las opiniones de éste. Aunque con retraso, la nueva
Psycosocial rehabilitation as ethical principle filosofía de atender no sólo a la enfermedad sino a la do-
lencia de la persona, entendida ésta como la reacción del
Some important aspects of the therapist-patient sujeto anímico frente a la enfermedad que sufre o cree
relationship in psychosocial rehabilitation are reviewed, sufrir y la interpretación idiosincrásica2, llega a la psi-
stressing their ethical principles. Some thoughts arising quiatría. A esto contribuyeron los avances científicos en
from the clinical practice of the author are also given. They farmacología de los años cincuenta y la evolución y el cli-
mention the convenience of also keeping an ethical view in ma social de respeto a los derechos del individuo en los
the practice in psychosocial rehabilitation in mind. años sesenta.
Key words: Hace 30 años, en la Declaración de Hawai (1977), la
Asamblea General de la Asociación Mundial de Psiquiatría,
psychosocial rehabilitation, ethics. dictó unas normas, aún vigentes, sobre la relación con el pa-
ciente. En España, desde 1984, existe una carta de dere-
Introducción chos y deberes de los pacientes (INSALUD). No es hasta
1986, en la Ley General de Sanidad del 25 de abril cuando
La persona enferma y la enfermedad han recibido va- se formulan en una norma de derecho positivo. Se incluí-
rias interpretaciones según las épocas y condicionantes so- an por primera vez la mención del derecho a la información,
ciales. Atendiendo al desarrollo histórico de la relación a prestar el consentimiento informado y a la plena integra-
médico-paciente, ésta venía sustentada en que el enfermo ción de las actuaciones relativas a la salud mental en el sis-
haría bien en entregarse, sin reservas, al conocimiento del tema sanitario general. Además se contemplaba la total
profesional y en soportar «pacientemente» cualquier pro- equiparación del enfermo mental al resto de personas que
cedimiento que éste le indicara. El término paciente de- requieren servicios sanitarios y sociales.
terminaba, pues, el sello cultural de entender la relación
médica desde la óptica del principio de beneficencia, sus- Las normas de derecho
tentada además en el término que en filosofía se conoce co-
mo «Paradoxon socrático». Dicho término se sintetiza en En la legislación actual los principios básicos se refieren
la sentencia socrática; «quien sabe no puede no ser bueno»1. al respeto a la dignidad de la persona y su derecho a deci-
Todo esto cobraba mucho más sentido cuando el enfermo dir, previa información, sobre las opciones de tratamiento.
En los pacientes psiquiátricos, el proceso de consentimien-
Correspondencia: A. García Nieto. to informado, necesario para que puedan ejercer su dere-
Centro Residencial de Rehabilitación. cho de autonomía a través de la comprensión lo más exacta
FEAFES-CÁCERES. Servicio Extremeño de Salud. posible de su proceso y de las alternativas terapéuticas po-
C/ Ana Mariscal, 4. sibles3, implica un juicio balanceado entre el «respeto a la
10005 Cáceres. persona» del paciente y la necesidad terapéutica de «modi-
Correo electrónico: residenciadir@apafenes.e.telefonica.net ficar su intención patológica»4.
Rehabilitación psicosocial. 2007; 4(1):37-40 37